Soneto 364. PINSAPO DESCLAZO
De cuando en vez un pinsapo descalzo
De cuando en vez un pinsapo descalzo
germina al pie de un terreno calizo
y en su frenético surco deslizo
las callejuelas que en mis chanclas calzo.
En los colgantes geranios realzo
las huellas que en primavera amortizo
con asentamiento del agua que hizo
el estratégico ramo que ensalzo.
La luz del monte me infiere y confiere
un paseo fugaz por la alquería
que agita profusas horas al día.
En un ramal de vida que me quiere
preservo el árbol milenario de guía
que aguarda en tus peñones mi alegría.
José Mateo Angulo García
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