Soneto 374. ATONÍA POLIÉDRICA
Somos Solsticio y Equinoccio en métrica
como el engendro limpio del cielo
o como atonía poliédrica
desvelada en la frialdad del hielo.
Somos explosión de luz concéntrica
como estrella habitada en rascacielo(s)
o como espiral lasciva y tétrica
que se funde en calor con el deshielo.
Somos vacuolas ya diseminadas
en apeaderos de amor y experiencia
de las células vivas que han mutado.
Somos rompeolas de olas aladas
en invernaderos de almas y ciencia
de trémulas vidas que así se han amado.
José Mateo Angulo García
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